Directamente del Facebook de Víctor Ugalde, quien es miembro de la Sociedad de Directores del STPC, viene el reporte de la mesa que se realizó en la Cineteca Nacional para analizar la situación en la que se encuentra la industria cinematográfica mexicana ante la probable cancelación o modificación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
VICTOR UGALDE·JUEVES, 30 DE MARZO DE 2017
El pasado lunes 27 de marzo se efectuó la mesa EL TLCAN Y EL FUTURO DE LA INDUSTRIA CINEMATOGRÁFICA MEXICANA en las instalaciones de la Cineteca Nacional. La mesa fue conducida por el Director de la misma, Dr. Alejandro Pelayo quien presentó a los oradores y como primer acto dio la palabra al Lic. Jesús Hernández Torres, ex titular de la Dirección de Radio, Televisión y Cinematografía (82-88) quien comentó:
“El giro que han tomado las relaciones comerciales y políticas México-Estados Unidos de Norteamérica, en los primeros meses del 2017, vuelve imperiosa una reflexión pública y profunda sobre los efectos del TLCAN en la industria cultural cinematográfica mexicana, a 23 años de su firma.
Entre las múltiples interrogantes a resolver destacan: ¿en que ha beneficiado o perjudicado a nuestra industria el TLCAN? En su caso ¿estos efectos se pueden revertir o no? ¿se han modificado las condiciones laborales de los trabajadores mexicanos? El modelo de exhibición impulsado por el TLCAN: ¿qué afectaciones ha tenido en el impacto a la población, especialmente, a la más joven? Con la próxima renegociación: ¿cuál debería ser la agenda del modelo de cine mexicano?, recordemos que Canadá, el tercer socio del TLCAN, hizo una reserva cultural de su cinematografía.
Quisiera proporcionar un primer marco de referencia, en el periodo comprendido del año 2006 al 2016, se produjeron 1081 películas mexicanas y se exhibieron solamente 703, es decir, existe un rezago de 378 películas mexicanas sin estrenar.
Lo anterior se podría explicar, pero no justificar, si acudimos a la ley de la industria cinematográfica de 1952, que establecía la obligación a los exhibidores del país de reservar el 50% de pantalla para la proyección de películas nacionales, esto cambió con la nueva ley federal de cinematografía de 1992, modificada para adecuarla al TLCAN, bajando el porcentaje al 30%, y una disminución paulatina hasta llegar a sólo el 10% para el año de 1997.
Somos la cuarta cinematografía en el mundo por el número de asistentes a las salas de cine: 327 millones en 2016 y somos la décima con recaudación en taquilla con 911 millones de dólares, es decir, estamos entre los diez primeros lugares de las industrias cinematográficas del mundo.”
Al concluir su intervención tomó la palabra el LIC. ALFONSO ROSAS PRIEGO productor de cine independiente de larga trayectoria quién abordo el tema: Las condiciones de la producción nacional. Antes y después del TLCAN
El Lic. Rosas Priego comentó “que a lo largo de estos 23 años de su creación, el Tratado de Libre Comercio con los Estados Unidos de América y Canadá, ha sido perjudicial en un alto grado al sector de la producción, quien desde entonces ha estado padeciendo el gran daño que se le hizo al cine mexicano con su firma ya que el sector cultural fue incluido sin estudios previos y sin medir las graves consecuencias en todos los ámbitos que acarrearía su inclusión…”
“…Aunque se realizaron algunos foros, al final no se tomó en cuenta a la comunidad cinematográfica”
“…Es muy importante mencionar que Canadá no incluyó sus industrias culturales en el tratado de referencia.” “…Mientras Canadá y Estados Unidos han procurado políticas económicas para sus industrias culturales, sobre todo en los primeros años, México optó por la autorregulación con escasas políticas y programas de estímulo a su economía cultural.”
“…Contrario a lo que dice el Sr. Donald Trump, el TLCAN ha traído innumerables beneficios para el cine de Estados Unidos lo que ha significado un dominio avasallante de la industria cinematográfica norteamericana sobre México y Canadá”
“…La industria cinematográfica norteamericana es de suma importancia para su país, lo ven como un asunto de Estado, al grado que se dice que su cine no se maneja en Hollywood, sino en Washington”.
“…Con la firma del tratado en el área cultural, solo hubo un ganador y ese fue los Estados Unidos de América, México y Canadá son los grandes perdedores ya que se encuentran en una situación desventajosa en cuanto a sus negociaciones con Estados Unidos. Los beneficios obtenidos por las grandes compañías norteamericanas ( Estudios ) reunidas en el Film Board son muchos ya que lograron imponer su proyecto ideológico, económico y político.”
“…y los beneficios para nuestro país han sido considerablemente inferiores a lo prometido y esperado. Por otro lado, como lo mencioné anteriormente, los beneficios para Estados Unidos han sido muchos ;”
a) “se cambió la Ley de Cinematografía del año 1952, donde se eliminaron las obligaciones del Estado en cuanto al apoyo a la cultura fílmica. Con la nueva ley todo se dejó a las leyes del mercado, dejando a nuestro cine totalmente desprotegido; b) se eliminó el 50% de tiempo de pantalla; c) La libre importación de películas extranjeras, eliminando los aranceles; d) liberación del precio de entrada; e) la eliminación de impuestos locales y federales, como fue el Impuesto Sobre Espectáculos Públicos; f) se les permitió transferir el IVA al público; g) otro muy importante es que por la doble tributación, pagan solamente el 10% de los ingresos obtenidos en el país al gobierno mexicano, lo demás lo capta el fisco norteamericano, mientras que el productor mexicano paga una gran cantidad de impuestos en toda la cadena productiva.”
b) “En México somos un país exportador de grandes cantidades de regalías, básicamente a Estados Unidos.
Los patrones culturales importados influyen necesariamente en los gustos de los consumidores, los que se traducen en cambio de hábitos de todo tipo, modificando las costumbres de consumo de la población y por ende, su demanda en bienes y servicios. La invasión cultural de Estados Unidos en el mundo ha sido tan grande que, por ejemplo, Arabia Saudita e Irán han promulgado leyes con las que prohíben a sus ciudadanos contar con antenas receptoras para ver programas extranjeros”
“En cambio, a los dedicados al quehacer cinematográfico en México, se les prometió que se incrementarían las importaciones y exportaciones de insumos y películas; se aumentaría el empleo y sus percepciones; se elevaría el poder adquisitivo, etc., etc. “Lamentablemente nada de esto ocurrió.”
“El Tratado en gran medida, colaboró a que se cerraran una gran cantidad de empresas mexicanas relacionadas con el quehacer cinematográfico.”
“Otro factor importante que perjudicó gravemente al cine mexicano fue la autorización del doblaje para todas las películas ya que antes solo se autorizaba en las infantiles. Los norteamericanos y sus abogados hicieron una gran labor de lobbing para lograrlo.”
“Jaime Serra Puche, Secretario de comercio de aquella época y que fue uno de los promotores del Tratado de Libre Comercio, reconoce que faltó una lectura industrial sobre la cultura mexicana y estima que es tiempo de tenerla como parte de una nueva etapa del nuevo Tratado. Dice que Canadá no incluyó sus industrias culturales porque es una nación con un esfuerzo permanente por mantener integradas al Este y Oeste y que la manera de conservar su identidad se fincaba básicamente en las Industrias Culturales, por lo que todo que se tratara de incorporación de bienes y servicios fue intocable.”
“…Cuando al Sr. Serra Puche en una visita a su oficina como Secretario de Comercio de los miembros de Canacine se le planteó la inconformidad del sector producción, de forma por más prepotente y grosera, contestó que si no estábamos de acuerdo nos dedicáramos a otra cosa porque no había manera de correcciones o cambios.”
Por último reconoció que “la cultura nunca fue tema del Tratado”.
Víctor Flores Olea en su libro México, su Apuesta por la Cultura, dijo: “Hubo un descuido, lo que importaba era el mundo de la economía, recibir inversiones a costa de cualquier situación que se produjera en el país, incluso en el campo de la cultura”.
Jesús Galindo Casares, en la revista Razón y Palabra comentó: “La industria cultural de los Estados Unidos tiene una enorme presencia en México. La presencia inversa es casi insignificante. La situación con Canadá es de correspondencia, no hay cultura mexicana allá, no hay cultura canadiense acá. Sin embargo, en sus territorios, el problema para México y Canadá son las prácticas monopólicas que posicionan vertiginosamente el producto de los grandes estudios de Hollywood quienes utilizan prácticas contrarias a la libre competencia y amenazan con no dar su material a los exhibidores.”
“Eduardo Cruz nos dice: “En el mercado interno eran palpables los efectos del TLCAN, más allá de cifras y exámenes de identidad e iban desde el maíz palomero que se vende en las salas de cine, pasando por el celular cargado de internet, hasta la reformulación del gasto cultural en los hogares.”
En Canadá el cine norteamericano ocupa un 98% de las pantallas de cine y los canadienses se han vuelto maquiladores de los americanos ya que filmando en ese país reciben estímulos en forma de créditos fiscales. Filmando en Canadá se pueden reducir los costos hasta en un 57% gracias a todos los incentivos fiscales. El requisito es realizar una coproducción con una compañía canadiense.
“Se menciona en la comunidad cinematográfica que era tal el interés por la inclusión de la cinematografía en el Tratado de Libre Comercio que el presidente del Film Board en ese tiempo, que era el Sr. Jack Valenti, amenazó personalmente al Presidente Carlos Salinas de Gortari con que si esto no sucedía, el Tratado no sería firmado. Esto fue confirmado por algunas personas que estuvieron en esa reunión.”
“El compañero Víctor Ugalde, aquí presente, nos dice que “En el siglo XXI, las pantallas de cine, televisión e internet pertenecen a Estados Unidos y han logrado que la moda, forma de vida, alimentos y aspiraciones de los habitantes de otros países aspiran a ser y vivir como los americanos. Esto lo han logrado gracias a las películas y a la saturación de la publicidad. A México y a Canadá les cuesta mucho trabajo conectarse con el público local y extranjero.”
Continúa diciendo “A partir del cambio de modelo económico al de apertura comercial total y sin condiciones, el esquema del cine popular se resquebrajó. El cine mexicano se fue convirtiendo en una industria de producción media con una cadena que solo benefició los distribuidores norteamericanos y exhibidores de gran capital , al tiempo que arruinó a los productores fílmicos , impidiéndoles el acceso a grandes estratos de nuestra población, lo que propició que a mediados de la década de los noventa, nuestro cine estuviera a punto de desaparecer como industria cultural”.
“La industria cinematográfica mexicana, vio reducir su presencia y comunicación con su público. De esta industria dependían, antes de la firma del Tratado alrededor de 50,000 familias en empleos directos e indirectos. Al día de hoy, esta cifra ha disminuido considerablemente ya que solo el 10% o sea 5,000 familias siguen dependiendo de esa actividad.”
“Actualmente en Estados Unidos, la gran mayoría de los connacionales, no asisten a las salas de cine por temor de ser arrestados y deportados. Antes de la firma del Tratado de Libre Comercio, en EUA se exhibían entre 65 y 70 películas al año, había distribuidoras especializadas en cine mexicano y cadenas de cines dedicadas casi exclusivamente a la exhibición de dichas películas. Ahora no queda nada que ofrecer a los casi 30 millones de latinos que radican en aquel país !!!!”
“También antes de la firma del TLC, el cine mexicano contactaba en México con el 50% de la población y las empresas norteamericanas aportaban el 38% de estrenos al año, ahora lo de ellos es mas del 80%. “
Cuando hay estrenos de películas grandes, se les destina casi el 89% de las pantallas del país, dejando el resto para el cine mexicano y las películas de otros países.
“En cuanto al costo de producción, después del Tratado se elevó considerablemente ya que subió de $200,000.00 a 300,000.00 dls en costo promedio a $1,500,000.00 dls por lo menos.
En los últimos años, solamente el 10% de las películas mexicanas se recuperan totalmente u obtienen ganancias, un 30% recuperan parcialmente. El resto pierde dinero.
Agradezco su atención y si me permiten hacer un comparativo de competencia entre las industrias cinematográficas de México y Estados Unidos, sería como enfrentar a una tienda OXXO con WALMART. Verdad que es difícil?
En conclusión, se debe pugnar porque ahora que se va a revisar el Tratado de Libre Comercio, se saque a las empresas culturales y hacer una reserva para lograr apoyarlas lo más posible para que vuelva a tener el lugar que se merece y le corresponde.
A continuación la PROFESORA MARCELA FERNANDEZ VIOLANTE, Secretaria General del SINDICATO DE TRABAJADORES DE LA PRODUCCIÓN CINEMATOGRÁFICA expuso brevemente la lucha de la comunidad fílmica para incluir al cine en otras condiciones en el TLCAN en 1992 pero desgraciadamente los neoliberales del momento no atendieron las peticiones de la comunidad. Todo esta puntualmente resumido en la tesis de licenciatura de Tonatiuh Israel de la U de G. Mas adelante agrego “Nos peleamos con Canacine, con la Motion Pictures, era un choque de ferrocarriles desbocados, y no cedimos, la gente nos apoyo mucho y conseguimos una mejor ley y apoyos al cine mexicano. Hoy espero que eso no se olvide y volvamos a dar la lucha. El cine mexicano no está de acuerdo con sólo 10% de pantalla, ni con el duopolio que existe en la exhibición. No nos vamos a dejar”.
A continuación intervino el LIC. RAMON OBON, ex Director Jurídico de la SOCIEDAD GENERAL DE ESCRITORES DE MEXICO con el tema: La coyuntura internacional: Las obligaciones internacionales en los tratados.
“El cine estadounidense es un factor preponderante en la exhibición, por lo que no se pueden promover las películas mexicanas. Cuando se firmó el TLCAN existía una reserva de 30% de pantalla para el cine mexicano. Pero es tal la voracidad de las empresas estadounidenses que lograron disminuir eso hasta 10%; es como si invitas a tu casa a una persona y tú acabas durmiendo en el cuarto de servicio. Hay un problema de abuso de derecho y competencia desleal con el cine mexicano que debe salir del tratado porque es un bien cultural; las películas reflejan nuestra idiosincrasia y no podemos verlas porque hay un acaparamiento de las salas por parte de los grandes estudios y monopolios disfrazados”. “Afortunadamente las ultimas reformas a la Constitución de la República nos posibilita cambiar lo términos del tratado ya que en su primer capitulo se establece el derecho a la cultura, ya que ahora este capitulo se llama de los derechos humanos y las garantías individuales
SR AGUSTÍN MEZA, Secretario General de la SECCIÓN 49 DEL SINDICATO DE TRABAJADORES DE LA INDUSTRIA CINEMATOGRÁFICA con el tema: La realidad de los trabajadores cinematográficos con 22 años de TLCAN. Sus palabras apuntaron
“Para los trabajadores cinematografistas es y ha sido muy problemático vivir con el TLCAN ya que cuando inicia el tratado se pensó que la industria cinematográfica norteamericana sería un artífice para todos y cada uno de nosotros pero al poco tiempo nos dimos cuenta que fuimos perdiendo nuestra posibilidad de trabajo, ya las producciones extranjeras traen a todo su personal técnico: antes de que se diera el tratado de libre comercio tenían por obligación sacar visas de trabajo y contratar al 5 x 1 con los trabajadores cinematografistas mexicanos.
Nosotros como sindicato hemos perdido 70, 80 por ciento de posibilidad de trabajo, cuando vienen a trabajar en México por esta situación.
Al día de hoy ya no llegan producciones extranjeras a México y segundo nuestra cinematografía no la dejan crecer y en específico los estados unidos:
Considerando todo este problema, creemos que deberíamos estar fuera de este tratado de libre comercio, ya que cada día se pierde la posibilidad de tener una cinematografía fuerte y sana.
LIC SERVANDO GONZALEZ, director de RELACIONES INSTITUCIONALES DE LA ASOCIACION DE LOCUTORES DE MEXICO con el tema: El impacto social del cine mexicano
“México es una potencia cinematográfica que produce grandes beneficios económicos pero desgraciadamente no para nosotros. Somos el cuarto país en consumo de boletos, el decimo exportador de regalías para EUA pero existen 378 películas mexicanas sin estrenar, es decir el equivalente a tres años de producción total. Urge cambiar los términos del tratado para que la riqueza de este país sea para nosotros y no sigamos como un país exportador de regalías que solo consume lo extranjero, es decir lo norteamericano.”
Por ultimo VICTOR UGALDE, Presidente del OBSERVATORIO PÚBLICO CINEMATOGRÁFICO RAFAEL E PORTAS abordo Elementos para renegociar el TLCAN en defensa del cine mexicano y afirmo.
“Con los datos expresados en esta mesa, no queda duda alguna, gracias al TLCAN existe un amplio y férreo control de nuestra economía por parte de las empresas trasnacionales que encabezan los norteamericanos.
Canadá y México han aumentado sus consumos de productos de los grandes monopolios de EUA. Nuestra economía genera más pero básicamente las que reciben los beneficios son las empresas norteamericanas. En contra de lo que afirma el ignorante de Trump, los mexicanos no hemos sido los beneficiados del TLCAN, son las empresas trasnacionales las que se han enriquecido gracias a la baja de impuestos y al control del mercado con prácticas anticompetitivas que dañan la libre competencia y arruinan a sus competidores…
Con este tipo de prácticas perdimos todos, en principio, los pueblos: el de México, el de EUA y el canadiense. En seguida las pequeñas y medianas empresas de todos los países inmiscuidos y por último la cultura del mundo al imponerse una pobre visión unipolar sobre la variedad de la multiculturalidad que nos enriquece siempre.
Afortunadamente la coyuntura actual abre la posibilidad de enmendar los caminos equivocados por los que nos condujeron los neoliberales priistas los últimos 23 años, pero para que esto realmente suceda, la comunidad fílmica tiene que movilizarse y ahora si ser escuchado por todas las autoridades que van a intervenir en la renegociación para no salir aún mas perjudicados ya que algunas apenas están aprendiendo
Hay que tener en cuenta que los efectos del TLCAN han sido múltiples, en parte porque estuvieron mal negociados y en otra gran parte porque los miembros del ejecutivo no han tenido la voluntad ni el conocimiento para aprovechar los mecanismos de defensa existentes en el texto negociado.
Los escenarios posibles donde nos vamos a mover en los próximos meses son los siguientes
1.- Mientras se renegocia el TLCAN,
a.- Se invite a todos los integrantes del sector productivo de la cultura fílmica para que elaboren un diagnóstico y un proyecto de desarrollo en beneficio de México.
b.- Se tengan presentes las obligaciones establecidas en la Convención sobre la protección y promoción de la diversidad de las expresiones culturales en especial los artículos 7, 8, 16 y 17.
c.- Se mantenga la obligación del 30% de tiempo de pantalla para nuestro cine, mientras se reforman las leyes de cine y de radiodifusión para su cabal cumplimiento.
d.- Se pongan más requisitos a las reglas de origen en materia de propiedad intelectual para acceder como nación más favorecida, tomando en cuenta las asimetrías con nuestro vecino del norte.
e.- Cuando inicien las negociaciones, será obligatorio para el gobierno mexicano invitar al «cuarto de al lado» a las cabezas de los sectores culturales que serán materia de la renegociación.
Mientras se renegocia tenemos que exigir que se dé cabal e irrestricto cumplimiento a las obligaciones establecidas en el TLCAN en los siguientes puntos:
a.- Se tome una medida de emergencia por competencia ruinosa y amenaza de daño serio a la industria cultural cinematográfica nacional por parte de las empresas norteamericanas, creando un arancel temporal de acuerdo al daño causado.
b.- Se dé cumplimiento irrestricto al artículo 19 de la Ley Federal de Cinematografía en las 178 plazas en las que se proyecta el cine norteamericano de forma abusiva e ilegal.
c.- Se utilicen, en beneficio de toda la cultura del cine y el audiovisual, los demás mecanismos para defender la propiedad intelectual y combatir las prácticas contrarias al libre mercado establecidos en dicho acuerdo.
e.- Se eliminen los acuerdos de doble tributación MEX/USA para que las empresas norteamericanas tributen al fisco mexicano, y no al norteamericano, el ISR generado en nuestro país.
2.-En el supuesto de que el presidente de los EUA comunique que se cancela el TLCAN (hecho que se consumaría seis meses después de recibida dicha notificación) exigimos que:
a.- Se restablezcan los aranceles vigentes antes de la existencia del TLCAN; por ejemplo, el impuesto a las importaciones temporales al valor del costo de las películas y programas de televisión que se introducen al país por cualquier medio; el impuesto sobre espectáculos públicos; etc.
b.- Se cancelen los tratados de doble tributación MEXICO/USA y las empresas paguen el ISR por concepto de transferencias de regalías a sus empresas matrices.
c.- Se actualice la LFC recuperando el 50% del Tiempo de Pantalla para el cine mexicano y del mundo en concordancia con lo estipulado en la CPPDEC
d.- Por último, que se establezca con Canadá un acuerdo de cooperación y ayuda mutua para que las industrias culturales obtengan los beneficios de la excepción cultural, dada la relevancia de sus contenidos en la formación del imaginario nacional, su aportación al imaginario mundial y su destacado papel como motor del desarrollo económico de las naciones e impulsor de la convivencia y la paz social.”